martes, 14 de febrero de 2017

ASUMIENDO PROBLEMAS HEREDADOS

El nuevo ( ya no tanto) gobierno municipal de El Campello conocía perfectamente la situación que heredaba. Alguno de sus miembros no eran desconocedores al haber formado parte de la corporación municipal la legislatura anterior. Y éste conocimiento era el que parecía inspirar el discurso del cambio con el que los diferentes partidos políticos ( principalmente Compromís y el PSPV-PSOE) se presentaron ante la ciudadanía. Asuntos como: vertedero, piscina municipal, grúa municipal, parking de la avenida Els Furs, Plan General de urbanismo entre otros.
Sobre el vertedero, la primera actuación fue asumir la presidencia del consorcio, asumiendo igualmente que sus planteamientos reivindicativos dejaban paso a una posición institucional, lejos ( y alejándose) de los que consideró como aliados en el pasado ( los vecinos afectados). Sobre la piscina municipal, el "marrón" fue asumido previamente por todos, a pesar de ser conscientes (creo) de la desproporcionalidad de una obra que no se ajustaba, ni a la sostenibilidad ni a las necesidades. Ahora toca decidir cómo se gestiona, aunque poco margen de actuación tiene el gobierno municipal, algo que sabía perfectamente y que, sorprendentemente no fue planteado previamente: la cuestión piscina fue asumida como un asunto "institucional", asumiendo igualmente las responsabilidades inherentes que ahora deben expresarse en decisiones.
Sobre la cuestión de la grúa municipal, y tras de la decisión judicial, nos encontramos con un servicio en precario sin que ello haya suscitado una asunción de responsabilidades por parte de nadie pese a que supone, directa e indirectamente un costo para las arcas municipales: para todos y todas los vecinos y vecinas. En igual situación nos encontramos con el parking de la avenida Els furs. La diferencia es que el tema todavía está pendiente de decisión judicial, aunque a la vista de cómo se ha actuado, previsiblemente nadie asumirá ninguna responsabilidad y a nadie se le exigirá.
Y un nuevo-viejo tema salta a la agenda municipal aunque, sin ninguna duda, nunca la había abandonado: la organización municipal.
Si había un asunto sobre el que intervenir, éste era la propia organización municipal. La herencia dejada por la derecha no era solo complicada: era simplemente envenenada. Me explicaré.
Para acceder a un puesto dentro de la carrera profesional de un funcionario o funcionaria público, se precisa un proceso: concurso, concurso oposición, oposición libre, donde el principio meritocrático de igualdad, mérito y capacidad debe ser el que defina el procedimiento. Frente a ésto, el PP lo que hizo fue realizar nombramientos a través de lo que que en la administración local es "decreto-ley": el decreto de la Alcaldía. Y ésto vulneraba y vulnera abiertamente, como mínimo el principio meritocrático. Y frente a ésto, el nuevo gobierno municipal la única intención ha sido resolver el problema heredado a través de un instrumento administrativo complejo. una nueva Relación de Puestos de Trabajo. No por su dificultad técnica, sino por la coyuntura legal en la que nos encontramos: límites presupuestarios y retributivos establecidos básicamente en la Ley de Presupuestos del Estado.
Apostar por un procedimiento que nace viciado en su origen no es responsable: la Relación de Puestos de Trabajo del año 2000 fue impugnada por Subdelegación del Gobierno y las condiciones por las que fue impugnada y revocada persisten, por lo que insisto, apostar por una nueva Relación de Puestos desde la que regular lo que actualmente se encuentra en situación irregular es una irresponsabilidad, pues su recorrido parece previamente acotado.
El equilibrio institucional entre las diferentes estructuras y escalones administrativos es una garantía de seguridad jurídica aunque en alguna ocasión ésto pueda parecer un impedimento cuando no una injerencia en la "autonomía municipal". No es posible que una administración vulnere las disposiciones legales por conveniencia. Esta interpretación interesada provoca una paradoja: ¿Cómo puede la administración exigir el cumplimiento de las normas si su pretensión es vulnerarlas?.

La administración local tuvo un desarrollo positivo y dinámico bajo la dirección de un Secretario Municipal ( mi admirado Vicente Boix, desgraciadamente fallecido). La modernización de nuestra administración local fue evidente. Pero las "injerencias" indebidas e irresponsables en el diseño administrativo de los representantes políticos ha creado disfunciones que la han retrotraido a una situación claramente disfuncional, cuestión que se debería haber abordado por el nuevo gobierno como una prioridad. Al no haberse hecho, ahora toca asumir la responsabilidad política, y por supuesto, dar explicaciones sobre una cuestión que personalmente considero central: ¿la administración está al servicio de la ciudadanía?

No hay comentarios:

Publicar un comentario